“Ganadores son, también,  los que entienden la importancia de la tecnología y la innovación y las aplican en todas direcciones, cosa que ya no ocurre con los medios tradicionales de comunicación que, además, y en el caso específico de Colombia, han perdido toda credibilidad”

Encontré hoy, navegando por el infinito mundo de la Internet, los comentarios de Mauricio de Vengoechea, consultor en Comunicación Política, quien afirma que las elecciones “las ganan quienes comprenden los factores que motivan las percepciones y decisiones de los ciudadanos”. Además, dice este experto, que si no se atiende a lo anterior “los ganadores de encuestas seguirán siendo perdedores de elecciones”

Más adelante, Vengoechea advierte que “el fenómeno de ganadores de encuestas, pero perdedores de elecciones, es universal”, y cita el reciente caso de la derrota de Hillary Clinton ante Donald Trump, en Estados Unidos 2016. En Latinoamérica, destaca casos como las derrotas de Vargas Llosa frente a Fujimori, en Perú 1990; el de Irene Sáez, frente a Hugo Chávez, en Venezuela 1998; el de Uribe, en Colombia, donde ganó las elecciones de 2002 sin que las encuestas repararan en él; y el de Andrés Manuel López Obrador en México, donde perdió en 2006 tras liderar todas las preferencias de voto.

Pero, ¿quiénes y por qué ganan? Al respecto, Vengoechea explica que los ganadores imponen los temas de discusión, en lugar de ir a la defensiva respondiendo lo que dicen sus rivales. También, ganadores son los que entienden la importancia de la tecnología y la innovación y las aplican en todas direcciones para llegar con sus mensajes a la mayor cantidad posible de gente, cosa que ya no ocurre con los medios tradicionales de comunicación que, además, y en el caso específico de Colombia, han perdido toda credibilidad.

En nuestro país, y en la actual carrera política por la presidencia, es claro cuál de los candidatos ha impuesto prácticamente todos los temas (Ver columna “A la pata de Petro”) y ha dejado a sus contrincantes en la barrera de sombra repitiendo de manera tímida, cuando no burda, sus mismas propuestas. Adicionalmente, Gustavo Petro es el líder indiscutible en redes sociales, en las que tiene sobrada ventaja sobre sus adversarios y por las que se comunica permanente y directamente, cosa que ocurre en una proporción muy baja con los demás.

Ahora, si de lo que se trata es de ´factores que motivan las percepciones y decisiones de los ciudadanos´, el candidato de la Colombia Humana llena a reventar las plazas públicas de todo el país hablando de paz, de justicia, del medio ambiente, de educación, de las mujeres, de la salud, de la vejez digna, de los niños, del buen trato a los animales, etc. Por su parte, el líder en las encuestas, apadrinado por Uribe, Popeye, Ordóñez, Vivian Morales y los cristianos, hace saber, con su discurso y apoyos, que en un eventual gobierno suyo la corrupción seguirá galopando, se volverá a la guerra, se reactivarán los paramilitares, se quemarán libros, se maltratarán animales y matarán toros, se acabarán el matrimonio gay, la adopción para los solteros, el derecho al aborto y el de morir dignamente; es decir, regresaremos a las cavernas.

En resumen, los sondeos pueden decir lo que quieran, los podrán manipular de mil formas, pero, la realidad es que hay un candidato que motiva excepcionalmente las percepciones de los ciudadanos y estamos, probablemente, ad portas de asistir a un caso más en el que el ganador de las encuestas será el perdedor de las elecciones.

Bucaramanga, mayo 11 de 2018